Ante Alemania se necesitan héroes. Lo fue Maceda, lo fue Fernando Torres y lo fue Puyol. España lo encontró temporalmente en Morata. No fue definitivo. Los alemanes, una roca de la competición, sacaron el carnet de gran rival. Así se debe entender el empate, como un salvoconducto para llegar a la última estación de Japón con la opción de ser líderes. Ni todos los rivales son Costa Rica ni todos son Alemania.